En Yucatán se pierden 100 hectáreas de humedales al año, aseguró el director de Santuarios Marinos de la organización Oceana en México, Miguel Rivas Soto, quien enfatizó que, desde la década de los 70, en México ha desaparecido más del 60 por ciento de estas áreas naturales.
En el marco del Día Mundial de los Humedales, el activista recordó que Yucatán ocupa el tercer lugar nacional la extensión (96 mil hectáreas) y el tipo de manglares que habitan en la zona, por lo que llamó a “poner más atención en su preservación”.
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De acuerdo con el Sistema de Monitoreo de Manglares en México, la península yucateca ocupa el primer lugar nacional en extensión de manglares con 4 mil 544 hectáreas, es decir el 60 por ciento nacional, de las cuales 200 mil están en Campeche, 247 mil en Quintana Roo y el resto, en la entidad.
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Rivas Soto recordó que los humedales son zonas muy importantes para la preservación de la biodiversidad de especies de flora y fauna, pero también repercuten directamente en actividades humanas como la pesca, ya que son estos espacios en donde varios ejemplares marinos tienen sus primeras etapas de vida para posteriormente trasladarse al mar, de donde son extraídos con fines alimentarios.
Explicó que las principales causas de la desaparición de humedales son: el crecimiento desorganizado de la mancha urbana, el turismo no planificado, la expansión de las construcciones -como las casas de veraneo-, y los complejos habitacionales, entre otros factores.
Destacó que entre los servicios ambientales que dan los humedales se encuentran: ser un gran hogar para especies de aves, peces, reptiles, además de tener una importancia en la captación de dióxido de carbono, lo que los especialistas conocen como “carbono azul”, fundamental por combatir la actual crisis climática en todo el mundo. También sirven como barreras naturales protectoras en las regiones, contra ciclones tropicales o huracanes.
Miguel Rivas advirtió que, pese a la importancia de los humedales, estos se pierden hasta tres veces más rápido que los bosques del planeta. “El llamado que queremos hacer desde Oceana este 2 de febrero es que hay que poner atención a los humedales, los estamos perdiendo a una tasa muy rápida y los estamos perdiendo porque no los valoramos”.
Los humedales se definen como áreas predominantemente acuáticas, que abarcan desde lagos y ríos hasta acuíferos subterráneos, pantanos, marismas, turberas y manglares, entre otros ecosistemas. A pesar de su vital importancia, son a menudo pasados por alto, convertidos en lugares para el desarrollo inmobiliario o centros de recreación debido al olor desagradable asociado con la abundante materia orgánica presente.
El director de Santuarios Marinos de Oceana lamentó la acelerada pérdida de humedales a nivel mundial, tendencia de la que México y Yucatán no escapan. El Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav), del Instituto Politécnico Nacional (IPN), las 100 hectáreas de humedales que en promedio pierde Yucatán “es una situación alarmante”, que afecta no solo a la biodiversidad sino también a las aves migratorias que dependen de estos entornos.
“La desaparición de humedales se atribuye a factores como el crecimiento desorganizado de áreas urbanas, turismo no planificado, expansión de viviendas de veraneo y complejos habitacionales. Estos ecosistemas ofrecen servicios ambientales cruciales, siendo refugios para diversas especies y desempeñando un papel fundamental en la absorción de dióxido de carbono, conocido como carbono azul, crucial en la crisis climática actual. Además, actúan como barreras naturales protectoras contra ciclones tropicales y huracanes en las regiones costeras” externó.
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NM