A un mes de haber comenzado la captura del pulpo maya, la temporada va viento en popa y es catalogada como uno de los años más beneficiosos para el sector pesquero en cuanto al octópodo, lo que ha permitido a los hombres de mar que se comiencen a levantar de la fuerte deuda económica que presentaron durante la pesca del mero y la langosta.
En este puerto del Litoral Norte, los marineros obtienen ingresos de 500 hasta los 2 mil pesos diarios, y en el Litoral Oriente las embarcaciones que salen diariamente capturan en promedio de 40 hasta 790 kilogramos, mientras que los primeros barcos trajeron de ocho a 10 toneladas.
En el puerto de abrigo de Chabihau se registra todos los días un movimiento de 60 embarcaciones y un promedio de 180 marineros que se dirigen entre las 12 y 14 brazas durante la madrugada para poder regresar con un promedio de 100 a 200 kilos de especie mediante la actividad artesanal
El pescador Juan José Pech señaló que a un mes de haber dado comienzo la fiebre del pulpo ha tenido un gran respiro económico, pues la temporada del mero fue bastante crítica por el bajo valor y el poco producto que se capturó, el mismo caso para la langosta. Ahora, han podido ir saldando los préstamos que realizaron para invertir en el mantenimiento de las embarcaciones.
El entrevistado precisó que varios de sus colegas que se retiraron de la actividad marina por la crisis, han retornado con sus embarcaciones.
“En un mes nos ha ido bastante bien, el precio del pulpo se ha mantenido estable, al igual que la carnada. Este año dimos un comienzo con el pie derecho y así nos hemos mantenido”, subrayó.
Se averiguó que las compañías se encuentran pagando el kilo del pulpo en 100 pesos, y la comercialización del cangrejo ocol que sirve como carnada se vende al mismo monto, lo que hace posible poder realizar esta actividad que ha dejado buenos ingresos económicos.
En los primeros 30 días de constante movimiento se estima que se ha capturado un promedio de 60 toneladas de pulpo en este litoral. Explicaron que cada pescador genera una captura promedio de 50 kilos diarios.
“Ahora que el tiempo lo permite, se está pescando bien con los cordeles, está saliendo el animal, pero hay veces que cuando el tiempo es malo, se pesca menos”, recalcó Juan José Pech.
Jorge Chi, pescador, agregó que en los últimos días se ha registrado bonanza; sin embargo, las cantidades de pesca se han reducido, de pasar a traer 150 kilos en promedio, ha disminuido a 50 por todos los tripulantes que van en las lanchas.
“Cada lancha sale con tres personas, entre todos estamos trayendo 50 a 70 kilos, una cantidad baja, pero esperamos que se recupere”.
Hasta el momento el puerto de abrigo se mantiene bastante tranquilo y sin queja alguna por el ingreso de pescadores foráneos como se ha tenido en otros puertos y que ha desatado la furia de los marineros locales.
“Aquí todo está tranquilo, pero si al comienzo de la pesca se sintió la presión por el caso de Telchac Puerto, cuando lo invadieron pescadores foráneos, hasta ahora no ha ocurrido por estas partes, pero estamos atentos de ellos”, comentaron.
Por las ganancias que se encuentran registrando los hombres de mar, estos apuntaron que han comenzado a realizar sus ahorros para utilizarlos en los tiempos cuando se suspendan las salidas, específicamente cuando ingresan los nortes a finales de año, cuando va en su recta final la captura del pulpo.
Hasta ahora, el gremio pesquero se siente beneficiado y consideran que hasta el mes de diciembre pueda estar así la temporada; sin embargo, puede que haya algunas modificaciones en el valor de la carnada, ya que esta podría llegar a subir como cada año.
En el Litoral Oriente las embarcaciones que salen diariamente capturan en promedio de 40 hasta 790 kilogramos, mientras que los primeros barquitos trajeron de 8 mil a 10 mil kilogramos.
El pescador Martin Cruz reveló que probablemente el manchón de agua turbia que había en la costa mar adentro hizo que recalen los pulpos a poca profundidad, obteniendo capturas que van de 40 hasta los 70 kilogramos de moluscos catalogados como uno y dos, o sea con el kilo de 450 a 900 gramos.
El buen clima que ha prevalecido, el viento y las corrientes marinas han favorecido la pesca que se hace de manera artesanal mediante el gareteo, dijo el pescador Julio Can, quien explicó que a comparación con otros años después de la pandemia, en este les está yendo mucho mejor, pues con lo que capturan sacan para la gasolina, los víveres, para el patrón y para la familia.
Comentó que los fenómenos naturales que se han registrado han sido tenues, lo que ha favorecido esta pesquería.
El pescador mencionó que en un principio la captura fue en promedio de 30 a 60 kilos, varios ejemplares que se sacaban aún no habían reunido la talla, por lo que los devolvían al mar. Pero a 28 días que inició esta actividad la pesca ha mejorado, incrementándose un poco más, hay algunos que logran superar el promedio, pero la gran mayoría asegura que sale para los gastos y deja una buena ganancia.
En cuanto a los barquitos que estuvieron arribando en el trascurso de esta semana tras estar sobre el mar entre 20 a 25 días trajeron de entre ocho a 10 toneladas, lo que indica que la pesquería del octópodo es buena hasta esta fecha.
Los precios del pulpo mediano van de los 80 a los 90 pesos, y el grande, que es un poco escaso, hasta los 100 pesos.
En este mes de septiembre que está en puerta, si las condiciones del clima lo permiten pudieran obtener un buen volumen del molusco, pues según aseguran los buzos hay una buena biomasa en el fondo marino de especies pequeñas que se están desarrollando. Don Julio explicó que si todos los pescadores devuelven al mar los pulpos que no tienen la talla, habrá suficiente para cerrar con números favorables la temporada.
GC