Los festejos por el 167 aniversario de la fundación de esta villa comenzaron la noche del pasado viernes, con una magna vaquería que se realizó en la explanada del Palacio Municipal, donde también hubo un encuentro de emprendedores locales que vendieron sus productos.
Con estas actividades inició la feria de la localidad, en la que se ofrece diversión para toda la familia a través de bailes populares, corridas de toros, carreras atléticas, rodadas, zumba y juegos mecánicos, entre otras amenidades para una sana diversión.
La noche del viernes la villa se vistió de gala para celebrar el 167 aniversario de su fundación, para lo cual, en punto de las 22:00 horas, jaraneros, familiares y amigos de la señorita Silvia Anahí Moo Cih se dieron cita en su domicilio para encaminarse hacia la explantada del Palacio Municipal, donde se llevó a cabo la vaquería.
Como parte del programa, se dio la bienvenida a Moo Cih, junto con su bastonero y ballet folclórico, que hizo su entrada triunfal en el recinto, para lo cual las orquestas jaraneras Julián y Modelo se encargaron de entonar la música.
Seguidamente, arribaron los demás grupos y clubes jaraneros de las distintas comunidades tanto de Maxcanú como de Chocholá, Chichí Suárez, Kopomá, Halachó, Umán, Kinchil y Calkiní, Campeche, entre otros.
Inmediatamente comenzó la coronación de la embajadora Silvia Anahí Moo Cih por parte de las autoridades locales, quienes se encargaron de colocarle la banda y la corona.
Siendo ya embajadora del aniversario, Moo Cih dirigió unas palabras de agradecimiento, en las que resaltó que se siente muy orgullosa de representar al municipio.
De igual forma, hizo una extensa invitación al público en general para que se diviertan durante los días que dure esta feria conmemorativa en la que habrá quema de pirotecnia, cascada de luces de colores, tronar de voladores, jaranas y más.
Luego de sus palabras arrancó la gran vaquería, en la que cientos de jaraneros ataviados con el traje regional zapatearon hasta las primeras horas del sábado.
De igual manera, emprendedores locales aprovecharon este festejo para instalar sus puestos en los que ofrecieron artesanías, ropa típica, hamacas, jabones, cremas, herbolaria, jarabes, miel, adornos y productos a base de jícama, entre otros.
Entre los participantes estuvo la familia de José Cih, mejor conocido como don Cheto, que es parte de cuatro generaciones dedicadas a la elaboración y comercialización de horchata de arroz, jarabe de diferentes frutas, así como jícama en distintas presentaciones
El presidente municipal, Camilo May Cauich, mencionó que en Maxcanú hay mucho talento y a lo largo del tiempo la demarcación se ha desarrollado y avanzado en infraestructura.
“Es un lugar de mucha historia, donde atraviesa el Tren Maya, lo que se puede aprovechar para impulsar el turismo”, finalizó.
La población de Maxcanú perteneció al cacicazgo de Ah-Canul antes de la conquista de Yucatán. En 1900, el municipio figura como cabecera del pueblo de Kopomá y dos fincas rurales llamadas Nupilá y San Isidro. Estas últimas en 1910 adquieren la categoría de pueblo.
Fue hasta 1914 que la localidad recibió el título de ciudad por decreto, el cual poco tiempo después es derogado volviendo a su condición de villa.
JY