Ha dado inicio uno de los periodos del año en que la probabilidad de encontrar zarigüeyas en Yucatán, aumenta, debido a que la temporada reproductiva se encuentra en su apogeo. Ya sean madres con crías, o juveniles solitarios, es importante que las personas tengan conocimiento respecto a cómo actuar en caso de encontrarse con uno de estos mamíferos.
En primera instancia, es importante destacar que las zarigüeyas, llamadas tlacuaches en otras regiones del país, no tienen parentesco con los roedores, por lo que no, no son ratas gigantes. En México se han logrado registrar al menos ocho especies, entre las que destacan Didelphis marsupialis y Didelphis virginiana, también conocidos como zarigüeya común y tlacuache norteño, respectivamente.
Ambas tienen la capacidad de habitar zonas urbanizadas, por lo que es bastante común poder observarlas, sobre todo por las noches, cuando salen de sus madrigueras en búsqueda de alimento. Debido a esto, un sinnúmero de ejemplares son atropellados, víctimas de la velocidad de los automovilistas.
La presencia de estos animales, a menudo pasa inadvertida ya que aunque comparten el mismo ambiente que los seres humanos, intentan evitar el peligro, por lo que se vuelven sigilosos. Sin embargo, es altamente probable, que al menos en una ocasión, las personas tengan algún tipo de contacto con este marsupial, que es buen escalador y oportunista, lo que significa que se alimenta de prácticamente todo, incluso de carroña.
Temporada reproductiva en Yucatán
En territorio yucateco las zarigüeyas se reproducen en tres temporadas distintas. La primera inicia a finales de febrero y principios de marzo; la segunda comienza a finales de abril e inicios de mayo, y finalmente, la tercera, tiene lugar en el mes septiembre.
Durante las tres temporadas es probable que crías con menos de tres meses de nacidas pueden ser halladas en las aceras, parques, jardines e incluso dentro de los hogares, en donde desafortunadamente es muy común que sean atacadas por mascotas.
¿Qué hacer en caso de encontrar una zarigüeya?
Existen distintos protocolos que se pueden implementar en caso de encontrarse con una zarigüeya. Si el ejemplar es encontrado fuera de las tres temporadas reproductivas, es altamente probable que pueda tratarse de un juvenil independiente, que ya ha desarrollado la habilidad para capturar a sus presas, por lo que no será necesaria la intervención humana, bastará con dejar que siga su camino.
Si se encuentra en algún sitio que ponga en riesgo su supervivencia, lo recomendable es reubicarlo en un área en donde no corra peligro como un terreno baldío o un parque con vegetación.
En caso de que la zarigüeya sea una cría muy pequeña, o el ejemplar sea adulto, pero se encuentre herido, la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady), cuenta con un programa especial para atender este tipo de casos. La facultad recibirá a los ejemplares de lunes a viernes en una horario de 8:00 a 14:00 horas.
Cabe destacar, que como parte de una estrategia para proteger a las zarigüeyas, es importante que durante la noche, las mascotas permanezcan dentro de casa, con la finalidad de evitar que puedan atacar a este mamífero, que desempeña un papel clave en los ecosistemas como controlador de plagas y dispersor de semillas, lo que contribuye a la reforestación.
