El pánico se apoderó de pasajeros del puerto y turistas que llegaron a bordo de crucero, pues en medio de la espera de unidades en la estación "Autoprogreso", un sujeto intentó suicidarse por medio de cortes en la zona derecha del cuello y la muñeca izquierda.
El suceso ocurrió en minutos previos a las nueve de la mañana cuando en el área destinada para el arribo de autobuses rumbo a Mérida, un hombre de aproximadamente 30 años de edad entró en un estado de paranoia y comenzó a argumentar que quería morir.
Acto seguido se produjo las heridas mencionadas, siendo la del cuello la peor de todas, pues tenía una abertura de siete centímetros. Debido a que la sangre salía a cántaros de dicha extremidad, el personal procedió a hacer la llamada de auxilio al 911.
En cuestión de minutos, lo que parecía ser una jornada llena de turistas y progreseños que buscaban arribar a las unidades para ir a sus labores, se convirtió en una escena policíaca de mayores dimensiones, pues intervinieron en el hecho dos patrullas con sus respectivas cuadrillas.
Un joven que se vistió de héroe fue Eymar Gracia Vázquez, paramédico qué se encontraba en descanso pero que procedió a atender al agraviado, pues logró ser detenido a tiempo.
Sin embargo, el hombre se rehusaba a recibir la ayuda, ya que pedía a los mismos presentes qué lo mataran, esto por razones hasta ahora desconocidas, aunque trascendió que el hombre se encontraba en estado inconveniente por una sustancia no identificada.
Finalmente, se logró contener la hemorragia y la pérdida de sangre se compensó con suministro de líquido y oxígeno, para entonces canalizar al suicida rumbo a un hospital a toda velocidad por una ambulancia de la SSP.
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GC