Una menor de 11 años de edad se privó de la vida en su vivienda de la comisaría de Xcumpich. La familia, al encontrarla inconsciente en su habitación, solicitó la presencia de las asistencias médicas, pero los socorristas nada pudieron hacer por la adolescente.
Con este deceso autoprovocado, la Entidad suma 16 hechos, entre las víctimas, con esta van cuatro mujeres y la de menor edad. Los hombres que se han quitado la vida son 12, la mayoría de quienes se han suicidado lo han hecho por ahorcamiento.
Aunque la información trascendió ayer, se supo que, pasada la medianoche del sábado, a través de los números de emergencia se recibió el reporte de que, en ese asentamiento habitacional, ubicado en el Norte de Mérida, una niña había atentado contra su existencia.
Fueron enviados los equipos de emergencia al sitio para prestar auxilio. Ingresaron al domicilio, pero solo pudieron constatar que la menor no contaba con signos vitales.
Al confirmarse el deceso, los agentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) delimitaron el domicilio y dieron parte a las autoridades ministeriales para las diligencias respectivas.
Diligencias del Semefo
En horas de la madrugada arribaron representantes de la Fiscalía General del Estado (FGE) hicieron acto de presencia para llevar a cabo las averiguaciones entre los familiares para obtener datos que pudieran contribuir para integrar la carpeta de investigación.
Concluida la labor de los ministeriales, personal del Servicio Médico Forense (Semefo) se hizo cargo de las diligencias para el levantamiento del cadáver. Luego lo trasladó a sus instalaciones, ubicadas en el kilómetro 45.5 del Anillo Periférico Poniente, para efectuarle la autopsia de rigor.
Durante los días transcurridos de este mes, este el segundo caso de una persona menor de edad, se suicida, el primero ocurrió en la colonia Fernando Novelo de Valladolid el 1 de enero, donde un adolescente de 17 años fue encontrado con la soga de su hamaca al cuello y sin vida.
En este contexto, el profesor investigador de la Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), Gerardo Serrano Pereira, aseguró que Yucatán ocupa el primer lugar en México con la tasa más alta de habitantes con comportamiento suicida.
Afirmó que a pesar de que se trata de un grave problema de salud pública, se puede prevenir si detectamos a tiempo algunos signos de alerta. Cada año, miles de personas atentan contra su vida y muchas más lo intentan, por lo que estos casos son tragedias que tienen efectos duraderos para las personas cercanas a la víctima.
“El suicidio es un fenómeno multicausal, multifactorial y multidimensional provocado por causas biológicas, psicológicas y sociales, y aunque es rica la explicación que se tiene, desafortunadamente, dada la complicación del fenómeno, se hace todo un desafío”, explicó.
La población más vulnerable es la juventud, continuó, ya que en esa etapa de la vida es cuando se presentan relaciones afectivas de pareja, en las cuales se presentan problemas o la falta de aceptación ante rupturas amorosas. Son situaciones que pueden convertirse en uno de los desafíos sentimentales más grandes que enfrentamos los seres humanos y, en algunos casos, pueden ser detonantes de comportamientos que pueden llevar al suicidio.
Según el docente, hay signos de advertencia en los que se debe estar alertas en los familiares o personas cercanas, como el cambio abrupto en el estado de ánimo o de comportamiento.
También está la forma de expresarse que habitualmente son señales que deben llamar la atención, en especial, si están acompañados de otra serie de actitudes inusuales que nos hagan valorar en la probabilidad y riesgo de atentar contra la vida.
Serrano Pereira destacó que es importante invitar, acompañar y sensibilizar a la persona que ha manifestado ideas relacionadas con suicidio, Sensibilizarlo para que acuda a instancias donde pueda recibir ayuda médica, psicológica, para que de esta forma intente reconectar con un proyecto de vida.
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NM