El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, otorgó un indulto general a su hijo, Hunter Biden, lo que llevó a la jueza federal Maryellen Noreika a desestimar el caso de armas en su contra este martes. La decisión ha generado un intenso debate político en Washington, mientras Biden enfrenta el ocaso de su mandato.
Hunter Biden, quien había sido declarado culpable de tres delitos graves por mentir en un formulario federal para adquirir un arma en 2018, podría haber enfrentado hasta 25 años de prisión. Sin embargo, al ser un infractor primario, era probable que su sentencia fuera más leve o incluso que evitara la cárcel.
Ante este escenario, la jueza Noreika decidió cerrar el caso una semana antes de la audiencia programada para su sentencia.
La medida del presidente ha provocado divisiones incluso dentro de su propio partido. Demócratas y republicanos han criticado el indulto, argumentando que socava la integridad del sistema judicial y amenaza con manchar el legado de Biden mientras se prepara para dejar el cargo el próximo 20 de enero.
Críticas al indulto presidencial
La oposición a la decisión ha sido generalizada. Los fiscales del Departamento de Justicia argumentaron que el indulto no debería borrar el caso de armas como si nunca hubiera ocurrido. Además, el fiscal especial encargado de las investigaciones contra Hunter Biden sigue oponiéndose al cierre de un caso paralelo en California por evasión fiscal, en el que se acusa a Hunter de no pagar 1.4 millones de dólares en impuestos.
El indulto también contradice declaraciones anteriores del propio Joe Biden. En junio, el mandatario aseguró públicamente que no intervendría en los casos legales de su hijo, comprometiéndose a respetar el veredicto del jurado. En reiteradas ocasiones, tanto él como su secretaria de prensa, Karine Jean-Pierre, habían negado la posibilidad de un indulto.
Implicaciones políticas y reacciones internacionales
El indulto ocurre en un momento en que los demócratas intentan redefinir su estrategia frente al próximo mandato de Donald Trump. La decisión de Biden podría limitar la capacidad del partido para criticar los movimientos legales del presidente electo, debilitando su posición frente a un electorado dividido.
Desde Angola, donde Biden realiza su primer viaje presidencial al continente africano, el mandatario evitó responder preguntas sobre el tema. En un acto público junto al presidente angoleño João Lourenço, Biden desvió las preguntas de la prensa con una sonrisa, mientras su equipo confirmó que no habría ruedas de prensa durante su estancia.
El futuro de Hunter Biden y el legado de Joe Biden
Este indulto marca un giro significativo en el manejo del caso de Hunter Biden, cuya resolución había estado plagada de polémica desde el año pasado, cuando un acuerdo de culpabilidad con los fiscales colapsó tras las dudas expresadas por la jueza Noreika.
La decisión presidencial será recordada como un momento clave en el cierre del mandato de Joe Biden, dejando abiertas preguntas sobre el impacto político y las implicaciones legales para su familia y su partido.
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