La ventana al mar que maravilla a todos los visitantes que llegan por primera vez a la zona hotelera de Cancún desde el aeropuerto, está condenada a quedar encajonada.
Lo anterior, luego de que a cada lado ya hay proyectos hoteleros que en pocos años, de acuerdo con las Manifestaciones de Impacto Ambiental (MIA) levantarán edificios de hasta 20 pisos.
En el costado izquierdo está el proyecto del Hotel Grand Solaris, que fue frenado este año al presentar diversas irregulares en materia ambiental y de permisos; sin embargo, todo parece indicar que la intención persiste.
Aunque está frenado, el predio sigue cercado por ser propiedad privada, por lo que si no es un centro de hospedaje de 450 habitaciones, en cualquier momento pueden presentar otro proyecto para dicho predio.
Por el otro lado, se realiza el proyecto Kukulkan 55, con 687 habitaciones y edificios de 20 pisos, en lo que fuera el hotel El Pueblito y que actualmente ya fue demolido; en estos momentos el predio está en etapa de limpieza.
El proyecto se ubica en el kilómetro 17.5 del bulevar Kukulcán, antes del Mirador de Playa Delfines, si se llega por el aeropuerto o después del Mirador, si se llega desde el centro de la ciudad.
El que fuera el hotel El Pueblito fue abandonado luego del impacto del huracán Wilma en 2005, ya que se hicieron algunos intentos para reactivarlo, pero al final quedó abandonado.
En junio de 2017, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) aprobó el proyecto Kukulkan 55 de manera condicionada por 22 meses para la etapa de preparación y construcción y 50 años para la operación.
Además de una serie de requisitos que debe cumplir el promovente Grupo Mex Tac S. A. de C. V., la autorización es precisa en señalar que sólo se autoriza en materia ambiental, sin perjuicio, en lo que determinen las autoridades estatales y municipales.
El proyecto Kukulkan 55 contempla una inversión de 200 millones de dólares, cuyo nombre será Ushuaia y forma parte de la cadena Palladium, de la familia española Matutes.
El inmueble se proyecta en forma de herradura y contará con diversos restaurantes y bares, gimnasio, beach club, así como vialidades, terrazas, jardines y estacionamientos, señala la Manifestación de Impacto Ambiental.
En otro momento también se había mencionado que el predio había sido adquirido en 2015 por Daniel Araf, que encabeza Armar Capital y Grupo Diamonds Desarrolladores, aunque ya no se le relacionó con el actual proyecto.
Por Lino Sarmiento