
El 77 por ciento de los 108 pacientes con cáncer infantil en Quintana Roo padecen leucemia, una enfermedad de las células sanguíneas, dijo Paulina Guillermo González, presidenta estatal de la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer.
Agregó que actualmente se han realizado 11 trasplantes de médula y 31 menores han logrado tocar la campana; sin embargo, hay mucho trabajo por hacer, porque no sólo se requiere subsanar los gastos del tratamiento, sino todo lo que representa para las familias.
Contó que tener un paciente ontológico es muy desgastante, entre el estrés y el dolor de saber que un ser querido está enfermo y todo lo que se requiere para salvar su vida, desde transfusiones, quimioterapias, trasplantes, hasta lidiar con todos los estigmas que hay entre la población, el panorama se torna complicado. Es por ello que actualmente trabajan de la mano con las universidades como el caso de Tecnológico de Cancún y la Universidad Anáhuac, que apoyan cada semestre con campañas entre su alumnado.
Hace un par de meses también se unió la Universidad La Salle con un evento temático para recaudar fondos, porque la asociación también contribuye con gastos de hospedaje, pasajes, alimento ropa y calzado, con la finalidad de evitar el abandono del tratamiento por falta de recursos, el tiempo juega en contra de los pacientes con esta enfermedad.
También dijo que trabajan muy bien con los bancos de sangre ya que son necesarios para algunos pacientes y pueden marcar una enorme diferencia entre la vida y la muerte.
La leucemia linfoblástica aguda ha sido identificada como el tipo de cáncer más común entre los niños en el estado. Esta enfermedad, que afecta la sangre, está seguida por linfomas, así como por tumores cerebrales, pulmonares y renales, los cuales han tenido cada vez mayor incidencia en las comunidades rurales.
Las familias en estas zonas están expuestas a productos químicos sin capacitación de prevención, ya que los trabajadores del campo, al regresar a casa sin cambiarse o limpiarse adecuadamente, podrían estar contaminando el entorno familiar. Esta situación, sumada a la exposición de las mujeres embarazadas, podría estar afectando la salud de los niños desde el vientre materno, concluyó la entrevistada.