Familias del fraccionamiento Paraíso Maya, afectados por la falta de regulación a las despachadoras de agua, señalaron la falta de mantenimiento, suciedad y deterioro de los equipos, ocasionando enfermedades gastrointestinales a quienes consumen el líquido.
Dijeron que esos son algunos de los factores que contaminan el agua con la que rellenan los garrafones, por lo que hicieron un llamado a las autoridades para que realicen una revisión a las máquinas, ya que ante la falta de regulación, los propietarios no prestan la atención debida.
Mayra Solano, cliente frecuente, comentó que la falta de regulación es una necesidad inmediata para que ellos, como consumidores, puedan tener un producto de calidad que no dañe la salud.
“Algunas de las plantas purificadoras ubicadas en el lugar se encuentran en pésimas condiciones, donde inclusive no cuentan con algún protector durante el llenado de agua, o las condiciones higiénicas adecuadas”, expresó.
En un recorrido por la zona se observó que algunas plantas están dentro de un local amplio, que sirve de resguardo y disminuye la exposición a contaminantes, pero otras están a la intemperie, dejando expuesto el mecanismo de llenado.
“Nosotros usamos este tipo de agua por la comodidad y por lo económico que resulta, pero últimamente hemos tenido problema, porque el sabor y el olor es muy fuerte a cloro, por lo que tenemos que buscar cuál es la mejor en la zona para poder llevar a la casa este líquido vital”, relató Diego Huerta.
Personal de la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) de la zona sur, señaló la importancia de la salud de los consumidores, por lo que pidió no temer a denunciar a las despachadoras que consideren no operan de manera adecuada, para realizar una revisión.