Pese a ser temporada de verano y vacacional, el destino turístico registra el peor agosto, con una ocupación del 66.5 por ciento, por lo que se proyecta que en los próximos meses los números puedan ir en descenso.
Pobladores, prestadores de servicios, especialistas y visitantes consideran que la inseguridad es uno de los factores que repercute en la llegada de turistas al destino, sumado a la oferta de otros países, como República Dominicana.
Especialistas en la industria, entre hoteleros y consultores, afirman que “es la peor ocupación que hemos tenido en un agosto”, al precisar que “la promoción se detuvo. Hace años que no promovemos el Caribe Mexicano profesionalmente”.
Reiteran que la operación de más de 25 mil espacios de rentas vacacionales en plataformas a nivel estatal afecta los niveles de ocupación en hoteles, sumado a la creación de nuevos impuestos a turistas y a “la inseguridad que ha estado peor que nunca.
El presidente del Grupo Cancún y con más de 40 años en el sector hotelero, Abelardo Vara Rivera, aseguró que de la ocupación del 66.5 por ciento, la mitad es generada por los tiempos compartidos y las rentas vacacionales; el resto, por la hotelería tradicional.
Comentó que a lo anterior se suma la creación de más impuestos para los turistas, la falta de seguridad, la infraestructura rebasada y el insuficiente mantenimiento de la existente.
“En la Zona Hotelera, el ambulantaje desbordado y puestos callejeros, además de los ilícitos, no paran. Los destinos o ciudades exitosos requieren más atención e inversión”, dijo.
Asimismo, se requiere reforzar las alianzas estratégicas con compañías aéreas y operadores turísticos, a fin de evitar que sean recurrentes los meses de temporadas bajas.
Se dijeron sorprendidos por ver que la ocupación en Cancún, llamada “Joya de la corona” en turismo, y el principal destino vacacional de México y América Latina registre un 66.5%, en sus más de 40 mil habitaciones.
De acuerdo con el reporte diario de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres, en el primer destino hay 65 mil 533 visitantes, en tanto que en todo el Caribe Mexicano, la Secretaría de Turismo de Quintana Roo afirmó que son 469 mil 144.
Los tres principales mercados para el Caribe Mexicano son Estados Unidos, que representa el 38.5 por ciento del total; México, con el 30.9, y Canadá, con el 12.9
A los especialistas les ocupa que sólo en julio, el Aeropuerto Internacional de Cancún (AIC), segundo en importancia en el país, pero el principal por la transportación de extranjeros, haya registrado una caída del 13.8 por ciento en la llegada de viajeros.
Deja huella en los visitantes
Ciudadanos admitieron que los asaltos, ejecuciones y balaceras han generado una mayor percepción de inseguridad en los últimos días en Cancún.
Por otro lado, touroperadores coincidieron que las ofertas de otros destinos, como República Dominicana, le están “arrebatado” mucho turismo en estas vacaciones de verano, hasta en un 18 por ciento respecto a otros años y no descartaron que regresen las temporadas bajas, como antaño.
En medio de una ola de violencia que se ha desatado en las últimas semanas, pero que se recrudeció durante el fin de semana pasado con la ejecución del chofer de una Van, cerca del Sindicato de Taxistas; la balacera entre delincuentes y elementos ministeriales, tras el atraco a una casa de cambio, casi en la entrada de la Zona Hotelera, así como el homicidio de otro miembro del gremio taxista, sin mencionar reportes de detonaciones por arma de fuego en distintos puntos de la ciudad, la gente se siente insegura y en algunos casos reconocieron que hasta puede haber cierta psicosis.
“En los chats de amistades o vecinos, todos los días leemos que si mataron a un taxista o que se escuchan disparos. Todos estamos neuróticos ante la incertidumbre o hasta que lo constatas en las redes sociales, como con los videos de la balacera en la Bonampak. Trabajo por ahí y tuve mucho miedo”, comentó Carla, joven cancunense.
En un sondeo realizado en la Zona Hotelera de Cancún, los visitantes mencionaron que antes no se escuchaba sobre temas de inseguridad en Cancún y últimamente sí. De hecho, les llamó la atención ver a elementos castrenses en las playas.
En tanto, trabajadores locales aseguraron que en toda la ciudad se percibe la inseguridad, incluyendo la zona de arenales, que es la más cuidada, porque en las Regiones o colonias irregulares casi todos los días ocurre un hecho de sangre.
Por su parte, prestadores de servicios turísticos admitieron que desde julio, la llegada de visitantes tuvo una caída, pues los cruces hacia Isla Mujeres registró un descenso del 18% e incluso aseveraron que a unos días de concluir la temporada de verano, este ha sido uno de los años más bajos.
Sin prisa por reforzar la vigilancia
El pasado 28 de julio, un menor de 12 años recibió un balazo en una playa de Cancún, luego de que integrantes de un presunto grupo criminal llegaron en motos acuáticas a Playa Caracol para atacar a alguien más, pero una bala perdida privó de la vida al niño.
Tras el hecho, tanto autoridades estatales como municipales anunciaron el reforzamiento en la vigilancia policiaca y la instalación, en conjunto con hoteleros, de cámaras de videovigilancia enlazadas con el C2.
La gobernadora Mara Lezama dijo que esas cámaras de seguridad se colocarían desde los hoteles hacia las playas, como una de las medidas para aminorar la inseguridad en la zona; además, aumentaría la presencia policial y los patrullajes en las áreas turísticas.
Hasta el momento no se ha revelado la fecha en la que comenzarán a colocarlas, pero el reforzamiento de patrullajes y presencia de elementos de la Guardia Nacional (GN) y de la Policía Turística es evidente, en especial en Playa Caracol, donde fue el homicidio.
Tras ese violento hecho, Por Esto! realizó un recorrido por los 20 kilómetros del boulevard Kukulcán. Se contabilizaron 34 cámaras de videovigilancia, todas sobre el carril central o los laterales, pero no en el área de playas.
Además, sólo hay tres casetas policiacas, en mal estado, 95 elementos de la Policía Turística, cinco patrullas, cuatro motocicletas y 10 patrullas todo terreno para las playas, lo que evidentemente es insuficiente para garantizar la seguridad de visitantes, aunque resalta una mayor presencia de la Guardia Nacional.
GC