La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) negó a Grupo Xcaret la compra de cuatro operadoras de ferris en Quintana Roo, porque se reduciría el número de ofertantes, provocaría que los usuarios tuvieran menos opciones y las otras empresas, menos incentivos para competir en precio y calidad.
Las operaciones rechazadas consistían en la compra de empresas que operan las rutas entre Puerto Juárez e Isla Mujeres; entre Zona Hotelera e Isla Mujeres; y entre Cozumel y Playa del Carmen.
El organismo federal advirtió que en la ruta Zona Hotelera-Isla Mujeres, la adquisición hubiera generado que Grupo Xcaret se convirtiera en un monopolio, lo que le permitiría subir los precios o reducir la calidad de sus servicios, sin que los consumidores tuvieran alternativas.
Por su parte, en la ruta Cozumel-Playa del Carmen, la transacción supondría una estructura de duopolio, lo que habría reducido la competencia y se habría traducido en precios más altos, menores opciones y frecuencia de viajes.
Los servicios de ferris son utilizados mayormente por habitantes de esas zonas, para trasladarse de ida y vuelta a su trabajo; así como por turistas.
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En el 2023, casi 2 millones de personas usaron ferris para viajar a Cozumel y más de medio millón hacia la Zona Hotelera de Cancún.
Lo anterior, añadió el organismo, es parte de la nueva fase de la política de competencia económica, por lo que buscará que la competitividad traiga beneficios tangibles a la población, utilizando al máximo sus herramientas para evitar la creación de estructuras de mercado dañinas para los ciudadanos.
Investigación
En febrero pasado, la Cofece informó la conclusión de su investigación y emitió un dictamen de responsabilidad que señaló la probable existencia de prácticas monopólicas en algunas de las rutas marítimas de Quintana Roo, como la de Playa del Carmen-Cozumel.
Recordó que en el 2012 inició la investigación porque en el mercado de servicios de transporte marítimo de pasajeros y mercancías en Quintana Roo había indicios de la posible existencia de acuerdos entre competidores para manipular precios, restringir o eliminar la oferta del servicio o segmentar el mercado.
En ese entonces, precisó que “la autoridad investigadora concluyó su indagatoria y emitió un dictamen de probable responsabilidad que señala la posible existencia de prácticas monopólicas absolutas”.
Por ello, dijo, “inicia el procedimiento seguido en forma de juicio, en el cual los agentes económicos y personas físicas podrán defenderse de las imputaciones en su contra”.
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Estas conductas conocidas como prácticas monopólicas absolutas, explicó, son sancionables de acuerdo con la Ley Federal de Competencia Económica, y fueron imputadas en el Dictamen de Probable Responsabilidad emitido por la Autoridad Investigadora de la Cofece.
En ese entonces, las empresas que daban el servicio en la ruta entre Playa del Carmen y Cozumel eran Ultramar y Winjet, luego de que Barcos Caribe quedará suspendida, tras la explosión de hace siete años.
Mientras que Grupo Xcaret, recién había entrado a operar en esta ruta, pero únicamente en el escritorio, al obtener el aval de la Secretaría de Marina, aunque aún no iniciaba operaciones.
GC
