La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) autorizó un desarrollo habitacional de condominios en una zona bajo régimen de protección ambiental, en Punta Sam. El terreno, de 4 mil 649 metros cuadrados, que albergará un edificio departamental de 11 niveles, se rige por el Plan Parcial de Desarrollo Urbano de la Península Chac muchuch (PPDUPCh).
Sin que la Manifestación de Impacto Ambiental precise el monto de inversión de la propuesta, ésta ya comenzó a promoverse en las plataformas de desarrollos inmobiliarios; sin embargo, la edificación incumple la norma, pues ésta establece un límite de 17 departamentos de lujo, sin embargo, tendrá 37.
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“Es ideal para quienes buscan vivir frente al mar o desean invertir en propiedades de alto rendimiento. Mistral está a solo 10 minutos de Puerto Cancún y a 30 minutos el Aeropuerto Internacional, lo que le da una ubicación privilegiada para residentes e inversionistas”, se lee en las páginas de los promoventes, que lo ofertan a precios que van desde 615 mil 110 dólares, es decir, 12.3 millones de pesos.
El proyecto denominado “Mistral” obtuvo la autorización de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), para que en un plazo de 30 meses lleven a cabo la etapa de preparación y construcción, en tan to que el apoderado legal de Opera dora Punta Sam SAPI, Juan Ignacio Athie Martínez dispone de 99 años para operación y mantenimiento.
La dependencia federal precisa en la autorización que en la solicitud de autorización de la MIA fue ingresada en junio del 2024, y en septiembre otorgaron una ampliación del plazo del procedimiento de evaluación.
El proyecto incide en la Unidad de Gestión Ambiental 9, denomina da Península Chacmuchuch , sector 2, con política de aprovechamiento sustentable, por lo que dentro de las condicionantes impuestas está la siembra de 200 metros de manglar, aunque tiene prohibido incidir en la zona donde exista la especie.
En el proyecto ejecutivo se precisan “dos impactos adversos valorados como significativos están relacionados con la afectación que se tendría en los ejemplares de especies fauna en categoría de riesgo, y por lo que representa el proyecto al consumo de agua del manto freático”.
La Semarnat establece que no se debe afectar la duna costera; sin embargo, la propuesta es promovida con costa casi privada y un club de playa.
En un recorrido realizado por este medio en la zona, se pudo constatar que, desde Puerto Juárez hasta Punta Sam, se edifican un sin número de desarrollos, entre ellos una ampliación del hotel SHA, además de la reciente construcción de zonas complementarias para el área arqueológica El Meco, además de una nueva zona habitacional para la Secretaría de Marina.
Por todos esos desarrollos, se puede observar adecuaciones en el tendido de la red de energía eléctrica, tuberías para agua potable, entre otros servicios a lo largo de toda la carretera costera.
