Sorprendida por el hecho de una mujer fuera el autor material del asesinato de su hija Teresa Aurora, Maritza Cuéllar Suárez manifestó su agradecimiento con las autoridades estatales con la manera en cómo se practica la justicia en el estado, aunque añadió que, “su corazón está desbaratado” por el crimen “tan terrible”, pero ha sentido alivio al recibir el apoyo de empleados de la Fiscalía General del Estado (FGE).
“Tuve una experiencia hace unos años no tan grata y se nota verdaderamente la diferencia (de la labor) humana (de las autoridades)”, indicó la madre al salir de la primera audiencia contra los presuntos responsables del artero crimen contra su hija, en la que se les imputó los delitos de feminicidio y homicidio calificado, ambos cometidos en pandilla.
“He recibido un apoyo pues muy bonito por parte de todo el organismo, de todo el órgano regional, del área de apoyo a víctimas y de feminicidios”, destacó Cuéllar Suárez.
Al ser cuestionada sobre el momento en que se enteró de quién había sido la persona quien ejecutó a su hija, la mujer relató que comentó que se dirigió a la acusada para decirle varias cosas.
“No recuerdo, pero las palabras fluyeron solas. Dentro de mi dolor y mi angustia, (me dirigí) a la inculpada y le dije, entre otras cosas, (que) es increíble que una mujer haya matado a otra. (Por qué) cuando alguien así es mala es verdaderamente malvada y esas cosas no pueden seguir pasando”, relató.
En ese tenor, contó que observó que la mirada de la juez se dirigía hacia los presuntos asesinos e interpretó su gesto de desaprobación.
“Ella miraba a los asesinos como diciendo: ‘¿cómo es posible que ustedes hayan hecho eso? ¿Qué hayan dejado a tres niños huérfanos, a una familia destrozada y a una muchacha que era una ejecutiva de un banco a dos metros bajo tierra?”, narró la madre.
Insistió que durante el juicio ella manifestó su orgullo por la labor que realizan las autoridades estatales en la impartición de justicia.
Sobre la posibilidad de que el crimen de su hija sea castigado con la máxima pena, Maritza Cuéllar señaló que esto servirá para que ya no ocurran más crímenes contra las mujeres.
“Cuando vean que la justicia sí se da, estoy casi segura que van a disminuir (los feminicidios). Cuando les pongan 90, 50, 60, 70 años de prisión a quienes cometen esos crímenes, van a empezar a reducir dichas actividades. Este tipo de delincuencia deberá aminorar cuando la justicia funciona sin corrupción, porque le digo algo, no he pagado ni un solo peso, hasta el agua, hasta comida nos han dado”, manifestó.
En ese tenor, la mujer insistió que recibieron “una acogida muy grande por parte de todo el personal”, por lo que reiteró su agradecimiento a las autoridades ministeriales y al gobernador Mauricio Vila Dosal.
Por otro lado, comentó que se siente tranquila porque los resultados del juicio sean positivos e informó que hoy tendrían una cita con la Procuraduría de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes (Prodennay).
“Ella (Teresita Anguas Zapata) fue una persona muy amable, y verá lo de la custodia de mis niñas, son mis nietas, pero son mías ahora que su mami no está. La pequeñita ya no va a conocer a su mamá y la niña de 10 años afortunadamente no estaba en Mérida, sino a lo mejor ya no estuviera con nosotros también”, señaló.
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Por último, destacó Cuellar Suárez que el hecho de que las autoridades estatales tengan “una actitud así, con respecto a las víctimas y que la respuesta sea tan positiva”, eso les dará esperanza a las mujeres en la entidad “de que la justicia se está procurando bien en apoyo a ellas”.
“Desgraciadamente mi hija ya no está y ojalá sea el último”, sentenció.la madre de Tere.
GH