El paso del gasoducto por diferentes puntos de Mérida continúa afectando las vialidades, pone en peligro a automovilistas y a todo tipo de vehículos al dejar muy dañado el asfalto.
Ahora las secuelas se pueden apreciar en la avenida García Lavín, donde las excavaciones se rellenaron y taparon de forma improvisada, sin que el Ayuntamiento de Mérida lo solucionara después de varios días.
Como POR ESTO! informó, estas situaciones fueron denunciadas por los regidores del PRI en mayo pasado. “Es lamentable”, afirmó la regidora Ana Gabriela Aguilar en aquella oportunidad. “A pesar de tener (efectivamente) las concesiones federales y los permisos municipales, con los que cumplen el marco legal, las autoridades municipales no supervisan los trabajos para estas obras”.
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“Las obras tienen sus permisos tanto federales como municipales; sin embargo, el Ayuntamiento no ha supervisado que se cumpla la bitácora y tampoco ha hecho parte de las obras a los vecinos”, secundó el regidor Óscar Medina.
La empresa Gas Natural del Noroeste notificó al Ayuntamiento de Mérida que haría zanjas a lo largo de más de 8 kilómetros lineales en el Norte de Mérida, las que iniciarían en una sección de la calle 32 de la avenida García Lavín con cruzamiento en la calle 11 del Periférico de Mérida, hasta la calle 49 de la avenida Cámara de Comercio con cruzamiento en la calle 50, en Prolongación Montejo.
Eso fue en noviembre de 2021. A casi dos años de distancia, las obras en esa parte de la ciudad continúan y resultan evidentes todas las irregularidades. Y es que la empresa no ha respetado los límites en las excavaciones y ha dañado seriamente la infraestructura, a pesar de contar con todos los planos municipales.
Por lo pronto, del Ateneo de Mérida hasta la calle 41, el carril rumbo a la avenida Cámara de Comercio se encuentra dañado, incluso el paso peatonal situado en la entrada de ese centro educativo está roto.
En ese tramo se colocaron conos y trafitambos viales para que los conductores manejen con precaución, pero hasta ayer no había personal para reparar el desastre.
Asimismo, en el semáforo que conecta la avenida García Lavín con la calle 23 de San Ramón Norte, hasta el pasado fin de semana tenía únicamente unas láminas para evitar que los vehículos no queden atascados en los huecos.
Soluciones
La solución fue rellenarlos con polvo. De hecho, en varios tramos los espacios fueron cubiertos con cemento y otros materiales, pero no con asfalto.
De igual manera, en la entrada de City Center, sobre la García Lavín, un pozo perdió la tapa y lo único que impide que los autos dañen sus neumáticos es otra lámina mal colocada. Curiosamente, este registro “sufrió” el paso del gasoducto, que al menos en esa zona fue debidamente cubierto con superficie asfáltica.
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AA