Yucatán

Naufragan 11 pescadores en el primer trimestre de 2024 en Yucatán; cinco siguen desaparecidos

La cifra de pescadores que han naufragado en altamar en Yucatán durante 2024 es similar a la registrada en todo el año pasado
En el primer semestre del 2024 se contabilizó la desaparición de 11 pescadores en aguas yucatecas / Jesús López

En el primer semestre del año se han reportado 11 hombres de mar desaparecidos en las aguas yucatecas, cifra similar a la registrada durante todo el 2023, cuando se contabilizaron 13. A esto se agrega el fallecimiento de varios pescadores e incluso tragedias dentro de los embarcaderos, ocurridos principalmente en la zona de Progreso.

Asimismo, se teme por la integridad de las tripulaciones que zarparon en las últimas horas, ya que las condiciones climáticas existentes suelen provocar naufragios, tanto para la navegación mayor como para la menor.

El titular de la Secretaría de Pesca y Acuacultura Sustentables del Estado de Yucatán (Sepasy), Rafael Combaluzier Medina, recordó que 13 pescadores desaparecieron durante el 2023 en toda la Entidad, cuando en años anteriores se extraviaban hasta 35 hombres de mar en 12 meses, desatando amplios operativos para evitar sus muertes en medio de sus naufragios.

Detalló que en este 2024 se han contabilizado 11 víctimas hasta mediados de junio, de las cuales sólo seis pudieron regresar a casa, a pesar de los peligros que se viven en altamar cuando se pierde alguna lancha o bote de un buque de dimensiones mayores.

Naufragios, robos de motores, descompresiones, embates del clima y males de salud son algunos riesgos que afrontan los hombres de mar / Por Esto!

Cabe recordar que el 7 de febrero la Secretaría de Marina (Semar) informó sobre el extravío de nueve navegantes en las costas yucatecas; un par de días después, fueron hallados dos hombres de mar de Celestún, quienes sufrieron el ataque de piratas modernos contra su lancha Lizandro 1, a la cual le sustrajeron el motor de borda.

La aeronave de vigilancia marítima de la Naval logró avistar a los afectados, lo que permitió señalar el punto georreferencial para que la embarcación Defender llevara a cabo su rescate. Los dos náufragos se encontraban en buen estado de salud.

Asimismo, entre los perdidos se contempló a cuatro marineros de Chiquilá, quienes zarparon el 1 de febrero a bordo del bote Andrea, el cual sufrió desperfectos por el mal tiempo. Afortunadamente, el 8 de febrero fueron ubicados por pescadores de la región que estaban en su búsqueda, los cuales los remolcaron al puerto, donde llegaron felices al encuentro con sus familias.

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En tanto, permanecieron como desaparecidos los tripulantes Ángel Collí, Eulogio Palomar y Fernando Canul, con domicilio en Hunucmá, quienes partieron desde el 31 de enero del puerto de Celestún.

A pesar de que se encontró la nevera de la embarcación en la que viajaban y varios navíos se sumaron a su búsqueda, 11 días después sus familiares acudieron al muelle de Celestún para despedirlos, luego de que no se reportara alguna señal de que siguieran vivos, además de que frenaron el operativo de localización que se mantenía desde el 2 de febrero.

Del total de casos registrados este año, sólo seis víctimas pudieron regresar a sus hogares / Jesús López

Posteriormente, el 9 de febrero salieron en búsqueda de escama Joel Pacheco González Burga y José Carlos Chávez Delgado, Cheeé, a bordo de la embarcación Ruth Selene, que zarpó de Chiquilá, Quintana Roo.

Los pescadores debieron retornar el día 11 y, al no hacerlo, se llevó a cabo un operativo que incluyó a marineros de El Cuyo, Las Coloradas, Río Lagartos y San Felipe, pero no dieron con sus paraderos.

Recuento de fallecidos durante el 2024

Con base en datos de POR ESTO!, hasta la fecha se han presentado tres decesos en Progreso en los seis meses que han transcurrido del 2024. Entre ellos, se tuvo un caso por ejercer la pesca recreativa con alcohol, mientras que los otros dos sucesos ocurrieron por infortunios como la descompresión y los malestares de la edad avanzada.

El primer evento ocurrió el 18 de marzo, cuando un conocido chofer de carga pesada acudió a la costa de Progreso para zarpar en compañía de un amigo que es parte del rubro. La combinación de la pesca como pasatiempo y las botellas de cerveza fueron contundentes para que la lancha comenzara a hundirse frente al Muelle de Chocolate. Por desgracia, el transportista falleció y solo el hombre de mar progreseño pudo sobrevivir.

En mayo, la tragedia que envolvió al gremio pesquero se desató en las primeras horas del miércoles 15, cuando una embarcación ribereña al mando de A.S.C., de 30 años, permanecía capturando escamas a 14 brasas de la orilla, donde un desafortunado poblador sufrió una descompresión mientras ejercía el buceo. El difunto fue identificado como S.T.C.S., de 57 años y originario de Timucuy. Resalta que el navegante fue sumamente conocido por su trabajo en altamar, pues contaba con varios años en el sector.

Familias se han despedido en los muelles tras operativos de localización fracasados / Por Esto!

Posteriormente, en el segundo fin de semana del mes en curso, trascendió la muerte de T.G.N., de más de 60 años, quien se encontraba navegando cuando sufrió problemas de salud. Sus compañeros intentaron ayudarlo, pero no se pudo hacer algo por el adulto mayor, el cual por cierto estaba realizando uno de sus últimos viajes, ya que planeaba retirarse.

El año pasado sí resultó contundente para el circuito pesquero, pues en la zona de Progreso se registró una decena de navegantes perdidos y un naufragio sin resolver; este caso trascendió a una semana de iniciar la pulpeada, en el que se vio involucrado el tabasqueño Hilario Luna Hernández, de 40 años, 12 de ellos residiendo en el citado puerto.

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En tanto, en el Litoral Oriente durante los últimos 20 años cinco personas siguen sin aparecer después de salir a la pesca: dos eran oriundos del puerto de San Felipe y tres originarios de Tizimín y sus comisarías de El Cuyo y Santa Rosa y Anexas.

Asimismo, después de la pandemia, a la fecha sólo se ha reportado la muerte de tres pescadores y de varios navegantes que fueron sorprendidos por alguna turbonada o norte.

En lo que respecta al buceo, del 2010 hasta este 2024 se ha contabilizado a 12 pescadores que perdieron la vida, según aseguró el empresario Manuel Sánchez Massa de Río Lagartos, quien precisó que la mayoría de las muertes se debió a la ambición de buscar más producto a profundidades que superaban las 15 brazas, es decir, de 20 a 25 metros de profundidad.

Autoridades navales y navegantes voluntarios han trabajado en conjunto para realizar rescates / Por Esto!

Entre ellos estuvieron dos hermanos, Braulio y Arbel, Tocino, los cuales fallecieron en 2020 después de sufrir una descompresión mientras buceaban por langosta. El primero en morir fue Braulio y al mes se fue su consanguíneo, causalmente ambos ingresaron a la misma cueva.

Igualmente, se tienen registros de que durante este período otros buzos arriesgaron sus vidas por capturar langosta, quienes sufrieron descompresiones, dejando a 15 personas con secuelas.

En las últimas fechas, al menos en todo el Litoral Oriente han sido sorprendidos alrededor de seis pescadores por fenómenos hidrometeorológicos como los nortes, turbonadas y el cordonazo de la Santa Cruz, pero todos lograron arribar a algún puerto o fueron rescatados sanos y salvos.

GC