El presidente del Poder Judicial de la Ciudad de México (PJCDMX), Rafael Guerra Álvarez, respaldó la reforma al Poder Judicial aprobada recientemente por la Cámara de Diputados y aseguró que los derechos laborales de jueces, magistrados, consejeros y trabajadores serán respetados en su totalidad.
Durante un mensaje dirigido a los impartidores de justicia del PJCDMX, Guerra Álvarez enfatizó que los derechos de la base trabajadora están garantizados bajo el artículo décimo transitorio de la reforma aprobada el 4 de septiembre. Este artículo establece de manera clara que las condiciones laborales y los derechos adquiridos por los trabajadores no serán afectados por los cambios que contempla la reforma.
Defensa de los derechos laborales
"Los derechos de las personas juzgadoras y de la base trabajadora son prioridad", señaló Guerra Álvarez. "El éxito depende de todos. La unión nos fortalece, la confianza nos consolida". Con estas palabras, el magistrado presidente hizo un llamado a los integrantes del Poder Judicial a mantenerse unidos y confiados en que sus derechos serán preservados.
Uno de los puntos que ha generado inquietud entre los trabajadores del Poder Judicial es la elección de jueces mediante voto popular, una de las propuestas más controvertidas de la reforma. Sobre este tema, Guerra Álvarez aclaró que la implementación de este sistema se llevará a cabo de manera gradual y respetando los tiempos establecidos en la reforma constitucional.
Elección gradual de jueces por voto popular
El magistrado explicó que el proceso de elección popular de jueces será gradual y afectará únicamente a las plazas disponibles, lo que permitirá que el sistema judicial se ajuste progresivamente a los nuevos mecanismos. "La renovación de los cargos de elección de las personas juzgadoras comenzará el próximo año", detalló. "Serán sometidas a elección popular únicamente las plazas disponibles, con lo que se respetan los derechos de magistrados y jueces".
Este proceso gradual deberá completarse para 2027, lo que significa que los jueces y magistrados actuales que no están en proceso de relevo no verán alteradas sus condiciones hasta que las plazas queden vacantes.
Llamado a la unidad en el PJCDMX
Rafael Guerra hizo un llamado a los integrantes del Poder Judicial a sumarse a la implementación de la reforma con responsabilidad y unidad, destacando que las propuestas presentadas por el PJCDMX fueron escuchadas durante el proceso de aprobación de la reforma. "Se nos escuchó y lo conseguimos: la gradualidad quedó plasmada en la Reforma Constitucional", recalcó.
El magistrado solicitó la solidaridad de todos los miembros del PJCDMX para concretar los cambios que la reforma plantea, asegurando que la implementación será ordenada y respetuosa de los derechos laborales de todos los involucrados.
Contexto de las protestas y suspensión de labores
Estas declaraciones del presidente del PJCDMX surgen en un contexto de protestas que ha involucrado a trabajadores del Poder Judicial. Durante los últimos días, los juzgados familiares, civiles y penales de la Ciudad de México han suspendido labores como parte de su protesta en contra de la reforma judicial. Los trabajadores consideran que la reforma podría afectar la independencia del Poder Judicial y modificar su estructura de manera radical.
A pesar de las protestas, Guerra Álvarez ha insistido en que la reforma ha sido elaborada con un enfoque de diálogo y respeto, escuchando las voces del propio Poder Judicial y buscando un equilibrio entre las demandas de la sociedad y los derechos de los trabajadores del sector.
El camino hacia la implementación de la reforma
Con la aprobación de la reforma judicial en la Cámara de Diputados, ahora el proceso pasa al Senado de la República, donde será discutido en los próximos días. De aprobarse también en la Cámara Alta, el país entraría en una nueva etapa de transformación del sistema judicial, con cambios estructurales que incluyen la elección popular de jueces, magistrados y ministros, además de la reestructuración de algunos órganos internos del Poder Judicial.
El respaldo de Rafael Guerra Álvarez a esta reforma y su compromiso con la protección de los derechos laborales del personal del PJCDMX son señales claras de que, aunque el proceso de implementación puede ser complejo, el diálogo y la conciliación serán fundamentales para su éxito.
IO
