Pasajera del vuelo 3065 de VivaAerobús exigió a las autoridades de aeronáutica civil frenar lo que ella llamó “atracos” que comete esta aerolínea, pues vende boletos baratos, pero ya con la demanda encima, con el argumento de una sobreventa, intenta cobrarles de más a los pasajeros para “hacerles” un lugar en los aviones, de lo contrario no le permiten viajar.
Ayer, la viajera aseguró que la empresa, no conforme con negarle un espacio en el avión, los empleados la culparon de no haber pagado a tiempo los 300 pesos para que le asignara un asiento en la aeronave, pero ella les recordó que nunca antes le habían exigido ese pago extraordinario.
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La afectada pidió omitir su nombre por temor a que, en futuros viajes, no le permitan volar. Después de casi una hora de alegatos, logró que la dejaran pasar a la sala de última espera, con la condición de que sólo podría abordar el avión, en caso de que uno de los pasajeros no llegar a tiempo o no se presentara, pero con la condición de que pagara los 300 pesos extras por el asiento.
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“Jamás vuelvo a utilizar esta aerolínea, porque no tiene a la vista los términos y condiciones para poder viajar, lo que les permite hacer cargos como el que me aplicaron”, reiteró.
Indicó que vino a Mérida para asistir a un congreso de la comunidad Hare Krisna y todo iba muy bien hasta ayer que acudió al aeropuerto, donde, después de esperar casi media hora para ser atendida, le indicaron que el vuelo estaba sobre vendido y si quería abordar y regresar a Guadalajara debería pagar 300 pesos por el asiento que no tramitó en tiempo y forma.
GC
