Un nuevo caso de maltrato animal se registró en la entidad, pues en esta ocasión, un perro murió cuando un hombre lo atacara con un arma blanca y lo decapitara, hecho que ocurrió en la comisaría meridana de San Pedro Chimay, ubicada en el Sur meridano.
De acuerdo con versión de vecinos, un hombre, con historial en la comunidad como consumidor de drogas, sacó una navaja y le cortó el cuello al can, de nombre “Toby”, al que dejó herida de gravedad. A pesar de que sangraba con abundancia, el animal se arrastró hasta la casa donde vivía.
Sus propietarios se mostraron impotentes por no poder hacer algo, pues las heridas eran mortales. Solicitaron la presencia de la Policía Municipal, cuyos agentes se abocaron a las averiguaciones correspondientes. Iniciaron un operativo de búsqueda para tratar de dar con el atacante, pero no tuvieron éxito.
Después arribaron al sitio elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), delimitaron el área donde perdió la vida el perro y posteriormente oficiales de la Policía Estatal de Investigación (PEI) y personal del Servicio Veterinario Forense se encargó de las diligencias ministeriales y el levantamiento del cuerpo de la mascota.
Desquita su furia en Seyé
En lo que va del año se han reportado varios crímenes contra animales, uno de los más recientes fue el que sucedió el 13 de septiembre en el municipio de Seyé, donde un hombre provocó la muerte de un perrito llamado “Cacahuate”, al darle una patada.
Por cierto, en hecho sigue impune, pues el agresor sigue libre, pues no fue identificado o, tampoco se sabe si hubo denuncia. La tarde de ese día un perrito estaba a las afueras de la casa de sus dueños. Un individuo que caminaba en la banqueta se topó de frente con el animal y le dio una patada en el cuello.
Fue tal la fuerza del golpe que el perro dio una voltereta y quedó bocarriba y el agresor continuó su camino como si nada. Luego, el dueño del canino, Marcos “N”, lo trasladó a Mérida para ser atendido, pero fue dormido, porque a consecuencia del golpe quedó paralítico.
A punto de ser linchado
Anteriormente, el 1 de abril, un perrito fue macheteado por un sujeto en el fraccionamiento Piedra de Agua, en el municipio de Umán, donde estuvo a punto de ser linchado por los habitantes, a no ser por la intervención de la Policía.
Se compartió en las redes sociales un video en el que aparece cuando Jorge “N” sale de su casa y ve que hay dos perros acostados a la sombra de un árbol. Se acerca a uno de ellos y le da un machetazo, con lo que le amputó la pata delantera derecha.
El perrito, conocido por los vecinos como “Negrito” corrió, mientras que el individuo ingresó con toda calma a su casa. Eso ocasionó la molestia de vecinos, quienes comenzaron a reunirse afuera de la vivienda del agresor para exigir justicia.
Llegó el hermano de Jorge y como negó saber el paradero de su hermano, los vecinos comenzaron a agredirlo e insultarlo al grado que elementos de la Policía Municipal Coordinada de Umán tuvieron que rescatarlo para evitar que lo lincharan. Los elementos lo resguardaron dentro de una unidad policiaca.
La esposa del agresor también tuvo que ser resguardada en una patrulla, por lo que los vecinos comenzaron a lanzar piedras y palos contra la unidad, exigían que los bajaran. Los oficiales fueron superados en número, así que la gente logró bajar a la mujer para golpearla. Con la llegada de agentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) se calmaron los ánimos.
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Embriagado en Dzidzantún
Otro caso que llamó la atención fue en el municipio de Dzidzantún, donde el 5 de agosto un perrito callejero fue obligado a tomar cerveza por dos jóvenes que estaban en un parque. En ese caso uno de ellos lleva proceso por maltrato animal y está en espera de que concluya el juicio para recibir sanción.
En este tenor, el 29 de marzo, el Congreso del Estado aprobó la nueva Ley de Protección y Bienestar Animal (Ley Rufo), que estipula hasta 10 años de prisión a quienes cometan actos de crueldad animal en Yucatán. Esta fue dedicada a Rufo, un perrito que fue asesinado por José C.P. con un machete, el 12 de agosto del 2023 en la colonia Chuburná de Hidalgo.
El día de la aprobación acudieron decenas de activistas a favor de los animales, acompañados por perros rescatados, entre ellos “Guardián”, que sobrevivió de un balazo. Perdió la movilidad de sus patas traseras, pero pudo recuperarse.
Este caso que inspiró la aprobación de esta ley se suscitó en un domicilio ubicado en la calle 21 de la colonia referida, en el Norte de Mérida, donde decapitó a su perro de nombre “Rufo” y luego tiró las partes en un bote de basura al portón del garaje de su casa.
Denuncia de testigos
Vecinos que presenciaron el actuar el sujeto se le acercaron para recriminarlo e hicieron el reporte a las autoridades que acudieron para iniciar las averiguaciones. Durante sus declaraciones en el proceso que se le siguió dijo que el animal lo mordió y por eso le quitó la vida. Sin embargo, los vecinos indicaron que el can era maltratado por el individuo y no le daban de comer. Luego de las pruebas presentadas por representantes de la Fiscalía, en el mes de abril de este año se le impuso como sentencia tres años y nueve meses por el delito de maltrato o crueldad animal.
También se le impuso que deberá recibir tratamiento psicológico, además de pagar una multa de 900 días de salario, así como la reparación del daño, que consiste en el suministro de alimento para mascotas.
